- Gemas Naturales
La Alexandrita: Una gema con doble alma
Hablemos de la Alexandrita: Una gema con doble alma
Hay piedras que brillan por su rareza, otras por su simbolismo, y algunas —muy pocas— por su capacidad de cambiar con la luz; la **Alexandrita o Alejandrita **pertenece a esta última categoría. Es una gema que parece tener doble alma: destellos verdes durante el día, rojiza al atardecer, casi como si siguiera su propio ritmo emocional.
La Historia
Creemos que cada joya debe contar su propia historia, y la de la alexandrita es una historia que habla de transformación, equilibrio y misterio. Es una gema que nació en Rusia en el siglo XIX, y desde entonces ha cautivado a coleccionistas y soñadores por igual. En la actualidad se considera una gema extinta, ya que con los años este ha sido de dura intervención. Nos encanta porque representa ese equilibrio que muchas veces buscamos: entre lo que mostramos y lo que guardamos para nosotras, entre la fortaleza y la sensibilidad. Es una gema que cambia, pero nunca pierde su esencia. ¿No es eso también lo que hacemos nosotras cada día?
En joyería, la **alexandrita **es una joya atemporal que transforma piezas clásicas en verdaderas protagonistas. Ya sea en anillos de compromiso, donde simboliza una unión que evoluciona con el tiempo, o en collares delicados, perfectos para llevar cerca del corazón, su presencia siempre llama la atención de forma sutil. También la encontramos en pulseras minimalistas que se convierten en amuletos personales, y en diseños más contemporáneos donde la luz revela todos sus matices.
La alexandrita no es común, y por eso no es para cualquiera. Es para quienes entienden que lo extraordinario no necesita anunciarse. Que la luz —y la forma en que la reflejamos— puede cambiarlo todo.
Llevar una joya con alexandrita es un gesto sutil pero poderoso, es recordar que hay belleza en lo inesperado, es reforzar al mundo que lo que somos, también depende de cómo decidimos mirarnos.
Y tú, ¿qué versión de ti misma eliges hoy?
XOXO
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